"todo cuanto hace y es el hombre está relacionado con la experiencia del espacio" (Edward T. Hall. La dimensión oculta)

4 de marzo de 2011

Decía en otro blog: «si consigo arrancar, ya veremos.. ». En aquella ocasión (albardial.blogspot.com) no sabía ni qué era un blog, ni adónde iba con él. Pero no es este el caso, en este blog pretendo contar por qué quise ser arquitecto y por qué quiero seguir siéndolo, puesto que arquitecto más que un título es una actitud.
Voy a arrancar “hablando” de la luz de mi calle el pasado día 1 de marzo. Mi calle, ahora, es una calle de La Mancha y aquí, la luz es limpia y desnuda. Ese día, a poco más de las 9 de la mañana, el sol estaba delante, pero había perdido su forma redonda y ocupaba toda la porción de cielo que recortan las casas. Era blanco, cegador, nuevo. En la mañana fría, hacía llegar su calor hasta mi cara y repetía: soy nuevo, nuevo, nuevo..
Acabo de leer a Manuel Juliá (Paseando con Dionisio Cañas) “decir”: «el sol primaveral de La Mancha es un sol de verano de cualquier otro lugar». Sí, cierto, solo que además no es estático, vibra, no cae desde arriba, sino que nos mira de frente.

2 comentarios:

galmar dijo...

Qué bonita tiene que ser esa luz:) aquí, viene del mar:)

galmar dijo...

me gusta leer textos tuyos, y los poemas de Lorca, también :) gracias!!